Además de buen comportamiento, se transformaron en un equipo que se codea con el éxito. Es que en abril pasado se quedaron con la Copa de Campeones, tras ganarle la final a Chacabuco, en el estadio Bicentenario de San Juan y con la base que en tierras mendocinas lograron el certamen de la AAVF.
Llegaron a la final Peñarol (por la Liga Sanjuanina de AFA) y Chacabuco (por la Liga Santa Lucía federada a AFA).
Indudablemente su objetivo seguirá continuar por el mismo camino y en el nuevo desafío que los espera en Salta.